Santo Domingo.-Rosa Ariza de Valera, expresidenta del Consejo Nacional de Colegios Privados ((CONACOPRI), demandó este sábado una “profunda” evaluación psicológica al personal docente de las escuelas públicas para detectar trastornos mentales y de conducta como la pedofilia y las distintas formas de violencia y acoso sexuales.
Señaló que las violaciones y el acoso sexuales, “invalidan socialmente a los niños y a los adolescentes” y debilita sus personalidades, haciéndolos incapaces de formar familias normales y convertirse en profesionales fuertes.
Ariza, propietaria del colegio Siglo XXI y asesora internacional en materia de infancia, aseguró que el Ministerio de Educación cuanta con los recursos económicos y el país con especialistas de la conducta serios y capaces, para hacer esas evaluaciones.
También te puede interesar:
“Hay que limpiar las aulas de profesores enfermos mentales y depredadores. Ese tipo de abusos invalida socialmente a los niños y a los adolescentes.”, expresó.
“Ante los casos de acoso, abuso sexual, abuso psicológico, burlas y abuso de autoridad de parte de adultos en perjuicio de menores de edad, que se están presentando en algunos centros educativos, urge darle el frente con valor”, agregó.
La educadora reaccionó así luego que los medios de comunicación del país se hieran eco de las acusaciones a dos profesores de la escuela básica La Siria, del municipio Quisqueya, en la provincia San Pedro de Macorís, los cuales fueron suspendidos de sus funcionales, al igual que la directora del plantel, la orientadora y el director administrativo.
El profesor Fernando Altagracia Peña Eusebia, uno de los acusados de violar una estudiante de 13 años, se entregó a las autoridades y se encuentra en prisión en espera de la medida de coerción correspondiente.
Otra denuncia de acoso sexual pesa contra el profesor de matemáticas Eduardo Montero Montero, quien fue acusado de hacer insinuaciones sexuales a una estudiante de 13 años de la escuela primaria Villa Flores, ubicada en la zona Sur de San Juan de la Maguana.
Contra Montero Montero, la Fiscalía de San Juan dictó una orden de alejamiento de la menor afectada e inició una investigación del caso.
En tanto que, la directora de la escuela, Sarah Elena Sánchez Fernández, le suspendió de sus funciones.
Entre las distintas formas de acoso sexual figuran, tocar su cuerpo, hacer gestos desagradables o inadecuados con la cara o las manos y emitir palabras relacionadas con el sexo.
Ariza de Valera llama a las autoridades a hacer campañas permanentes invitando a las familias a reforzar la protección de los niños y los adolescentes.
A los padres y tutores recomendó supervisar a quienes tratan a sus hijos en los centros escolares, visitando esos lugares, todas las veces que sea posible, Hacerse presentes y disponibles en todas las actividades del centro educativo.
